Dedicado a mi amigo Arleqino
entre cosas tuyas que leí
encontré trozos de dolor entrelazado
a un gozo con inmensidad de piel
no hay dolo en ese dolor velado
en esos instantes de amor
que describes con excelsa genialidad
porque este es el modo como gozas del asombro
y te revelas, rebelándote
dolor de rupturas, dolor incoherente
dolor de vacío y de ausencias
contra el que arremetes descarnándote
máscara tras máscara
desangrándote en mares de aguas torrentosas
como si fueran cosas desprendidas de ti
desgarrando silencios duros
te llovieron pestes y menudencias
úricas, acidas, traidoras
desarticulándote en giros helicoidales
sin tomar en cuenta que cada parte de ti, tiene poder
poder del alma que lucha a brazo partido
cae la mano y surge el garfio
la Erinia cuyo espectro
hospeda tu sangre eternizada en tinta
el tiempo suficiente de agarrar sol en cercanía
y luna en santidad de infierno y sabiduría
salida de las entrañas del tártaro
días de dilucidar encuentros cara a cara
la carne tiene que abandonarse al dolor
para resurgir de lo óseo al ocio
del llanto a la sonrisa
de lo antinatural a lo natural
de seleccionar los agregados
de ígneas emociones que le dan cuerpo a la vida
para eternizar los momentos siniestros
para recrear la carne macerada
el diestro acto de vivir
aquellos instantes de dolor inmisericorde
aquellos que nos queman
aquellos que nos hieren
aquellos que nos taladran
pero que a su vez nos arropan
y nos dan el valor de caminar
al borde del abismo
y de la muerte
...
porque este es el modo como gozas del asombro
y te revelas, rebelándote
dolor de rupturas, dolor incoherente
dolor de vacío y de ausencias
contra el que arremetes descarnándote
máscara tras máscara
desangrándote en mares de aguas torrentosas
como si fueran cosas desprendidas de ti
desgarrando silencios duros
te llovieron pestes y menudencias
úricas, acidas, traidoras
desarticulándote en giros helicoidales
sin tomar en cuenta que cada parte de ti, tiene poder
poder del alma que lucha a brazo partido
cae la mano y surge el garfio
la Erinia cuyo espectro
hospeda tu sangre eternizada en tinta
el tiempo suficiente de agarrar sol en cercanía
y luna en santidad de infierno y sabiduría
salida de las entrañas del tártaro
días de dilucidar encuentros cara a cara
la carne tiene que abandonarse al dolor
para resurgir de lo óseo al ocio
del llanto a la sonrisa
de lo antinatural a lo natural
de seleccionar los agregados
de ígneas emociones que le dan cuerpo a la vida
para eternizar los momentos siniestros
para recrear la carne macerada
el diestro acto de vivir
aquellos instantes de dolor inmisericorde
aquellos que nos queman
aquellos que nos hieren
aquellos que nos taladran
pero que a su vez nos arropan
y nos dan el valor de caminar
al borde del abismo
y de la muerte
...
4 comentarios:
El dolor tiene muy mala prensa últimamente, pero tiene su función de yunque en la forja de uno.
Recuerdo las palabras de un viejo amigo anarquista: "cuando toca ser martillo a pegar, y cuando toca ser yunque a aguantar". A él, la historia le hizo ser mucho más yunque que martillo, pero todo lo que hizo fue por convicción.
El lado negativo del dolor es que puede paralizar la acción por el miedo a sufrir, y es entonces cuando se crea el verdadero abismo, cuando la muerte se adueña de nosotros sin ser conscientes de ello.
Una vez escribí que asumiendo el dolor se gana libertad. Y aún lo mantengo a pesar de esta travesía de dolor que me legó el hecho de haber sido feliz.
Un beso.
Hola desde Barranquilla, Colombia, te envío un caluroso saludo y mis felicitaciones por tu blog pero por sobre todo por el contenido. Me encantaría que visitaras el mio donde están consignados mis poemas. Espero tus valiosos comentarios.
www.mandalaspoemas.blogspot.com
Un abrazo,
Víctor González Solano
beso tus palabras sonrojado
Que bonito, para el nuestro amiguito...arlequinito, jejeje, es total el niño este. Se lo merece por lindo y resultón.
besos para los dos....marimar
Publicar un comentario